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Son infundadas las acusaciones del Equipo de Investigación Conjunta (JIT, por sus siglas inglés) de que militares rusos están detrás del derribo del vuelo MH17 en 2014 en Ucrania, declaró la Cancillería rusa.
En un comunicado el Ministerio ruso expresó su "decepción" por las declaraciones hechas este miércoles por el JIT "sobre la supuesta implicación de militares rusos en la catástrofe del Boeing malasio МН17".
"Una vez más se lanzan acusaciones absolutamente infundadas contra Rusia, encaminadas a desprestigiar a la Federación de Rusia ante los ojos de la comunidad internacional", dice la nota.
El texto constata que "los representantes del JIT afirman que Rusia niega a cooperar en pleno" con la investigación de la tragedia.
"Rechazamos con firmeza estas acusaciones, desde el primer día de la tragedia la Federación de Rusia tiene el mayor interés en averiguar la verdad y está dispuesta a ofrecer su plena cooperación con la investigación", subrayó el Ministerio ruso.
La Cancillería apuntó que "los investigadores internacionales apartaron a Moscú de una plena participación en el JIT", mientras que Ucrania, recordó, se convirtió en su pleno miembro al obtener la oportunidad de "inventar las pruebas y reducir a la nada su responsabilidad por no haber cerrado su propio espacio aéreo".
"Todo esto confirma los temores ya mencionados sobre la parcialidad y la distorsión del proceso" de la investigación, señala el escrito.
