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Un interno de 62 años fue localizado sin vida la mañana de este jueves al interior de su celda en el Cereso de San Miguel. Aunque la versión oficial apunta a que fue un suicidio, destaca que el el cuerpo tenía sangre en la cabeza.
El ahora occiso, identificado como Reynaldo Sánchez Galindo de 62 años, era interno del Cereso de San Miguel, procesado por el delito de secuestro y que recientemente había sido trasladado al dormitorio "A".
En dicho dormitorio permanecen muchas personas que padecen alguna enfermedad degenerativa, ya que está ubicada muy cerca del área médica; sin embargo, la mañana de este día sus compañeros reportaron que Reynaldo se había colgado.
Personal de guardia y custodia confirmó que Reynaldo estaba con las rodillas flexionadas, con sus pies tocando el piso y con una rafia enredada en el cuello con el otro extremo atorado a un clavo en la pared.
El personal médico del Cereso confirmó que ya no tenía signos vitales, por lo que se le dio parte a la Fiscalía General del Estado, que inició la respectiva carpeta de investigación y traslado del cuerpo al servicio médico forense para practicarle la necropsia.
Aunque la escena aparenta un suicidio, también destaca que el hombre de 62 años tenía un hilo de sangre recorriéndole la cien, por lo que será la autoridad ministerial quien se encargue de confirmar la causa del deceso.
