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Las personas de la tercera edad son las más afectadas con el alza a la tarifa del transporte público en Puebla, esto debido a que ahora los conductores prefieren perder cuatro pesos a 8.50.
“Ya no nos quieren levantar”, dijo una mujer que este domingo participó en la marcha contra el incremento al costo del pasaje, actividad que partió del Paseo Bravo al zócalo.
En entrevista con Imagen Poblana, la mujer relató que antes del 12 de octubre los choferes se negaban a “levantarla”, debido a que la tarifa establecida para personas de la tercera edad era únicamente de cuatro pesos.
Sin embargo, tras el alza que cobró vigencia el 12 de octubre, afirmó que notó que los operadores del transporte ahora menos quieren subir a personas mayores y es que la tarifa se mantiene en cuatro pesos, en comparación a los 8.50 pesos que paga una persona que no forma parte de este sector de la población.
Aunado a lo anterior, aseguró que algunos conductores son groseros con aquellos hombres y mujeres que no portan su credencial del INAPAM y que por ende no pueden acreditar que tienen la edad necesaria para solo pagar cuatro pesos.
Otros entrevistados por este medio de comunicación denunciaron que la mayoría de las unidades no tiene la infraestructura necesaria para transportar a gente con algún tipo de discapacidad.
Dijeron también que gran parte de los choferes arrancan sin antes verificar que todos los pasajeros estén seguros, situación que se suma a otras tantas que solo generan inconformidad y molestia entre los usuarios.
Este domingo, después del mediodía, partió una marcha del Paseo Bravo al zócalo para exigir al gobernador Miguel Barbosa Huerta frenar el “tarifazo” que, a decir de los quejosos, solo perjudica los bolsillos de las familias poblanas.
