El Puebla de la Franja parece tener una maldición. Varios son los casos de jugadores que vistiendo la casaca camotera pasan con mucha más pena que gloria y cuando cambian de equipo se convierten en triunfadores.
El ejemplo más reciente es el mediocampista de Monarcas Morelia, Édgar Gerardo Lugo, quien hasta hace un año militó en la escuadra Franjiazul, donde mostró un bajo nivel de juego que le costó en algunas ocasiones salir abucheado de la cancha del estadio Cuauhtémoc.
Incluso, en una ocasión ingresó de cambio en el segundo tiempo y fue sustituido a los 15 minutos, lo que provocó que se encarara con el entonces entrenador del Puebla, José Luis Trejo.
En contraste, Édgar Gerardo Lugo ha logrado alcanzar un nivel de juego impresionante con Morelia, lo cual es premiado con la convocatoria a la selección mexicana para encarar el juego ante Colombia.
Caso similar es el de Sergio “Cherokee” Pérez, quien no pasó de ser un jugador “cumplidor” con la Franja y en Monterrey ya se coronó campeón e incluso fue convocado a la selección mayor el año pasado.
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