Algunos han dicho que es un don el saber que estamos equivocados y que podemos ser perdonados; pero ¿qué pasa con los que se equivocan y nos hacen daño?
Algunas veces deseamos castigar a dicha persona, pero quienes salen más castigados somos nosotros mismos y para liberarnos es necesario renunciar a esos sentimientos dolorosos que no son nuestros, sino que son de quien nos hizo daño, y hay que dejarlos ir.
Cuándo sucede esto, me pregunto, ¿qué hubiera yo hecho en lugar de la otra persona que me hizo daño, si yo hubiera estado en la misma situación y circunstancias?
Casi siempre concluyo que en ese momento, lo que hizo esa persona fue su mejor opción para él, aunque no para mí, y lo que la otra persona hizo fue sólo protegerse, no fue su intención hacerme daño.
¿Acaso no hice sentir yo alguna vez a otra persona de la misma manera?
¿Estaré pensando que mis sentimientos valen más que los de la otra persona?
Y de ahí viene la siguiente reflexión:
Me siento herido, pero eso no significa que la otra persona sea mala o en verdad quiera hacerme daño. Simplemente la otra persona no conoce toda mi vida ni mi pasado, igual que yo no conozco el suyo, y no sabe lo que traigo guardado en mi historia personal.
El perdón no se pide, se da... Y la razón más importante para darlo es que me libero de una gran carga.
¿Qué prefieres? ¿Ser feliz o tener la razón?
Notas Relacionadas
Chiles en nogada, la tradición culinaria que desafía el bolsillo en 2025
13 de julio de 2025
Lluvias acentúan la notable crisis de alumbrado, drenaje y bacheo en Puebla capital
13 de julio de 2025
Fortalece Armenta seguridad para el campo en microrregión de Zacapoaxtla
13 de julio de 2025
Brinda SSP apoyo a la población ante incidentes por lluvias
13 de julio de 2025
CAPCEE evalúa daño en barda afectada por lluvia en la Secundaria Técnica en Coronango
13 de julio de 2025
San Pedro Cholula alista adquisición de patrullas para reforzar la seguridad