¡Beber mucha agua mata, aunque los deportistas no lo crean!

Por extraño y poco creíble que parezca, el beber agua en exceso puede provocar la muerte. Especialmente en las personas que se dedican a la activación física intensa, cuya integridad la exprimen al máximo.   Si bien es cierto que el agua es el arma vital, también puede quitar la vida, de acuerdo con la revista The Clinical Journal of Sport Medicine.   Según el estudio hecho por científicos internacionales, los deportistas son el grupo de mayor riesgo frente a lo que se denomina hiponatremia asociada al ejercicio, que ha cobrado la vida de 14 corredores de maratón o futbolistas por la ingesta excesiva de agua durante el periodo de ejercicio.   Según refiere, estas consecuencias de deben a que los riñones se ven sobrepasados por tanta cantidad de líquido obligado a procesar durante el ejercicio, por lo que las células se inflaman.   “La hiponatremia, por tanto, se produce cuando la concentración de sodio en sangre cae a un nivel demasiado bajo, provocando una veloz inflamación del cerebro que puede provocar convulsiones, coma y, en última instancia, la muerte".   Algunos de los síntomas asociados a esta enfermedad son: mareo, vértigo, náuseas, hinchazón y aumento de peso durante el ejercicio, vómitos, dolores de cabeza, confusión, agitación o delirios.   Una solución para evitar este mal es beber lo necesario solo para evitar la deshidratación.