Una mujer dio a luz en uno de los vuelos de la aerolínea taiwanesa “China Airlines”, con dirección de Taipei a Los Ángeles, razón por lo que la aerolínea cobrará los gastos extraordinarios incurridos por el parto.
De acuerdo con La Crónica, según las normativas, la mujer no declaró que estaba en su 36 semana de embarazo y su parto obligó al avión a desviarse y aterrizar en Anchorage, Alaska, para que la madre y el bebé pudiesen recibir atención médica en un hospital.
La pasajera se dirigía a Estados Unidos para que su hijo naciese allí y pudiese disfrutar de la nacionalidad estadounidense, que se concede de forma automática a los nacidos en suelo de ese país.
La mujer volvió a Taiwán tras su deportación, por la que no se ha dado explicación alguna, mientras el bebé quedó a cargo de una familia amiga en Estados Unidos.
Según informes, se dijo que el costo del desvío fue de más de un millón de dólares taiwaneses.