
A menos de que pase algo extraordinario, el equipo argentino Boca Juniors sería el rival del Puebla el próximo 14 de noviembre para la reinauguración del hasta ahora estadio Cuauhtémoc, que cambiará de nombre el próximo jueves.
Si bien es cierto que el Porto de Portugal o el River Plate de Argentina, campeón de la Copa Libertadores, eran los favoritos de la afición poblana, sus compromisos de Champions League y Mundial de Clubes terminaron por no cuadrar en las agendas de ambos equipos. Además de que Boca Juniors desde hace dos semanas se coronó como campeón de su país, lo que facilitará firmar el contrato del partido amistoso.
Aunque para esa ocasión será la fecha FIFA, muchos de los jugadores de los equipos antes mencionados tienen compromisos con sus selecciones. Sin embargo, Boca Juniors vendría con todas sus estrellas, encabezadas por Carlos Tévez, Fernando Gago y Nicolás Lodeiro.
Según fuentes de la franja, en esta semana harían oficial el partido contra los Xeneize, que en el 2006 jugaron en el estadio Cuauhtémoc, cuando se disputó la Copa 475 y Puebla estaba de fiesta por el cumpleaños de su fundación.
En cuanto al cambio de nombre del estadio, banco Multiva y Comex son los principales candidatos a plasmar su marca en el coloso de Maravillas por los próximos 30 años, ya que la empresa Providencia Textiles es la que menos oportunidades tiene de ganar la “Licitación Pública Nacional No. 01/2015. Autorización de otorgamiento de denominación del inmueble identificado como Estadio Cuauhtémoc, ubicado en la Unidad Deportiva Maravillas del Estado de Puebla”.
Multiva pertenece al Grupo Empresarial Ángeles, del empresario Olegario Vázquez Raña. Dicho sea de paso, es el principal patrocinador de Querétaro, cuyo dueño es el mismo empresario, a través de Grupo Imagen.
Una desventaja que puede enfrentar la empresa de Vázquez Raña es que el Juez Tercero de Distrito en Amparo Penal del Distrito Federal, Augusto Octavio Mejía Ojeada, concedió a la conductora de Azteca Inés Sáinz la suspensión definitiva contra la decisión de la Procuraduría capitalina de archivar su denuncia en la investigación por la presunta venta ilegal del Club Gallos Blancos de Querétaro.
Este factor puede favorecer a Comex, que por falta de recursos perdió la oportunidad de plasmar su nombre en el estadio BBVA Bancomer de Monterrey, por lo que agotaría todos sus recursos para ganar la licitación y no solo ser patrocinador de la Liga MX, también tener uno de los inmuebles más importantes del país. El bautizo del estadio Cuauhtémoc le costará a la empresa ganadora cerca de 700 millones de pesos durante dicho plazo.