
Debido a que su opinión no fue tomada en cuenta en la Ley de Bienestar Animal, veterinarios exigieron ser escuchados por el Congreso del Estado, asegurando que dañan su dignidad profesional.
En rueda de prensa, Armando Domínguez Márquez, médico veterinario, señaló que dentro de estas leyes se está tomando una actitud inquisitoria hacia su profesión, llegando a catalogar algunas de sus prácticas médicas como maltrato animal.
Por este motivo, solicitaron una audiencia con el gobernador de Puebla, Antonio Gali Fayad, además de no judicializar la actividad estudiantil mediante sanciones y persecuciones.
Asimismo, pidieron inclusión de profesionales veterinarios en las leyes de protección y bienestar de todas las especies animales, pues afirmaron que no se conocen a fondo los procesos que lleva a cabo un veterinario en su labor diaria.