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La sospecha de que al menos 14 leones escaparon del parque nacional Kruger, situado al noroeste de Sudáfrica, llevó a la emisora local Capricorn FM a advertir a los habitantes de Phalaborwa, en la provincia Limpopo, a desplazarse con cautela.
"Se recomienda a los empleados de la Mina Foskor y a los ciudadanos que estén alertas en todo momento", indica un comunicado emitido por la emisora.
El Departamento de Desarrollo Económico, Medio Ambiente y Turismo de Sudáfrica ha desplegado un cuerpo de guardabosques para capturar a los depredadores, que deben ser devueltos al parque nacional.
A principios de esta semana se informó que un niño de dos años y medio, hijo de unos empleados de Kruger, murió de manera trágica después de ser atacado por un leopardo.
Los guardabosques hallaron al animal y lo mataron a tiros para evitar que en el futuro atacase a otro ser humano.
