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La recuperación del antiguo hospital de San Roque servirá para que albergue, en unos años, el Museo de la Talavera y el Barro poblano, reveló la secretaria de Cultura en el estado, Monserrat Galí Boadella.
Sin embargo, el inmueble debe pasar por uno o dos años de trabajos de restauración con recursos federales, pues cuenta con severos daños tras años de olvido y descuido, así como por las afectaciones que le dejó el sismo del 19 de septiembre de 2017.
La funcionaria señaló para Imagen Poblana que el rescate del espacio ubicado en avenida Juan de Palafox y Mendoza y la 6 Norte será para el proyecto urgente de un Museo de la Talavera y el Barro, así como recuperar su tradición de arte popular, ya que antes de su cierre, fue la sede del Mercado de Artesanía poblana.
“Se visitó San Roque y cumple con todas las características que solicita el programa, pero por lo menos serán dos años de trabajo de restauración, que por supuesto tenemos un proyecto de hacer un museo de la talavera y barro”, dijo.
Esto a razón de que en la semana el gobierno del estado materializó la recuperación de San Roque tras cancelar el comodato a 30 años que entregó el gobierno morenovallista al empresario Balcárcel Santa Cruz para el desarrollo de un Museo de Cera.
En ese sentido apuntó que el empresario tiene ahora mismo un proceso legal abierto por parte del INAH por los delitos de sustracción de piezas protegidas y saqueos ante los evidentes abusos en el edificio que data del Siglo XVII y que está catalogado como Patrimonio de la Humanidad.
“Lo que pasa es que se concesionó a un particular, que fue una política que ocupó desde el gobierno de Moreno Valle para acá. Por cierto, el gobernador Guillermo Pacheco se refirió a que esto no se tenía que repetir y además se tenía que revisar. Se dio la circunstancia de que se supo que se estaban sacando piezas de una antigua fuente y eso desató una preocupación, de hecho, esta persona tiene un juicio ahorita que se lo puso el INAH”, detalló.
Señaló que San Roque cuenta con todas las características para convertirse en un espacio rescatado y abrirse al público con una nueva dinámica, como sería un Museo de la Talavera, arte poblano que cuenta con denominación de origen y cuyos talleres más famosos en la actualidad se ubican en la misma avenida, la 6 Norte.
