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El partido de Brasil contra Argentina por las semifinales de la Copa América le está impidiendo dormir al técnico de la selección anfitriona del torneo, que no ha destacado en esta edición y que echa en falta a su máxima estrella Neymar.
"Vengo de dos días de mucha expectativa, no voy a dormir otra vez. Soy humano, queremos una victoria grande, queremos ganar siendo mejores", dijo el técnico Tite el lunes en una conferencia de prensa tras la práctica del seleccionado local.
Brasil y Argentina se medirán en uno de los clásicos sudamericanos el martes desde las 00.30 GMT en el estadio Mineirão de Belo Horizonte (oeste), pero por primera vez en una semifinal de Copa América.
En este estadio Brasil cayó por 7-1 ante Alemania durante el Mundial de 2014 pero Tite dijo que esa derrota ya es parte de la historia.
"Perdimos en el 1-7, ganamos a Alemania en la final de 2002, perdimos en 1950 en el Maracaná... En la historia uno escoge el capítulo que quiere. Ahora tenemos un gran clásico, dos grandes equipos", afirmó el entrenador.
La selección brasileña buscará marcar al delantero argentino Lionel Messi, pero no podrá frenarlo, dijo Tite.
"No hay forma de anular a Messi, se puede disminuir sus acciones, pero no se lo puede neutralizar", comentó a los periodistas.
Argentina, con 14 títulos continentales, ganó por última vez una Copa América en 1993, aunque disputó desde entonces tres finales.
Brasil, en tanto, se consagró campeón continental por última vez en 2007 frente a Argentina, para sumar su octavo palmarés en el torneo.
Ambas selecciones se han enfrentado en 10 finales desde el comienzo del torneo en 1916.
