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El alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, decretó el viernes un toque de queda en las localidades de Bosa, Kennedy y Ciudad Bolívar desde las 20:00 hora local (00.00 GMT de este sábado) hasta las 05:00 horas de este sábado (10:00 GMT) debido a los graves disturbios que ocurrido durante todo el día en esas zonas de la capital colombiana.
"Por la seguridad de todos los ciudadanos vamos a establecer toque de queda en las localidades de Bosa, Kennedy y Ciudad Bolívar a partir de las ocho de la noche hasta las cinco de la mañana del sábado 23 de noviembre, porque es donde se han concentrado los actos delincuenciales en el día de hoy", dijo el funcionario en una rueda de prensa transmitida en streaming por su despacho.
Más temprano el viernes, Peñalosa decretó la ley seca para toda el área de Bogotá desde el mediodía (17:00 GMT) del viernes y hasta este sábado a la misma hora como una medida para garantizar que se minimicen los hechos de violencia.
Los desórdenes se han presentado de manera aislada y a diferentes horas desde la tarde y noche del jueves, luego de que terminara un paro nacional contra el Gobierno que sólo en Bogotá congregó a unas 30.000 personas y en el resto del país un total de 253.000 ciudadanos, según reportaron las mismas autoridades.
Asimismo, en el municipio de Soacha, vecino a Bogotá, se decretó toque de queda para menores de edad, ley seca y alerta amarilla en hospitales debido a las alteraciones del orden público que se han presentado en las últimas horas.
"Hago un llamado a la cordura y la sensatez. Hay que entender que en este momento hay que tomar medidas", manifestó el mandatario municipal, Eleazar González, citado por el diario El Tiempo.
Más temprano el viernes hubo interrupción en el servicio de transporte masivo Transmilenio desde Soacha hasta Bogotá debido a los focos de violencia.
