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Mañana se cumplen 30 días desde que se anunció la fase 2 de la contingencia sanitaria y se ordenó cesar las actividades no esenciales, principalmente de los sectores de servicios, siguiendo con normas convencionales recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Paralizar la economía ha tenido costos muy altos en todo el mundo y algunos analistas adelantan que esta podría ser la peor crisis económica en la historia del capitalismo. ¿Cómo se ve el panorama laboral en el corto plazo?
Los primeros datos que se tienen al respecto son los proporcionados por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) que dan cuenta del empleo formal en el sector privado; para el mes de marzo se reportó una caída de 0.6%, la primera para un mes de marzo desde hace 8 años, esto equivalió a perder 130 mil empleos con respecto al mes de febrero. El número de trabajadores registrados ante el IMSS llegó a 20.48 millones, como se aprecia en la gráfica 1, esta cifra representa un crecimiento de 0.66% si se compara con marzo de 2019.
La caída del empleo formal en marzo no fue tan grave si se comparan los datos de forma histórica. En lo que va del año de han perdido 7 mil empleos, pero en lo que va del sexenio se han generado casi medio millón de nuevos puestos de trabajo.
Elaboración propia con datos de IMSS
El lunes próximo se publicarán los datos de INEGI de la Encuesta Nacional de Ocupación que mide tanto empleo formal como informal para el mes de marzo, de acuerdo con estimaciones del Observatorio Internacional de Salarios Dignos de la Universidad La Salle se espera que el desempleo alcance 3.8%, la tasa más alta desde septiembre de 2016.
Las condiciones en otras partes del mundo son más catastróficas. Estados Unidos reportó una tasa de desempleo para el mes de marzo de 4.4%, luego de que en febrero fuera del 3.5%; esta tasa es similar a la de mayo de 2017. El grupo más golpeado fueron los latinos que pasaron de una tasa de 4.4 a 6% de desocupación.
En Canadá el desempleó aumentó 2 puntos porcentuales y alcanzó el 7.8%; en España se llegó al 15% e Italia, 12%. Son las mayores cifras para un mes de marzo desde la crisis de 2008 y el deterioro más rápido del empleo en un periodo tan corto desde que se mide esta variable.
No obstante, estos datos son de marzo, se espera que abril muestre las cifras más negativas. La primera semana de mayo el IMSS dará a conocer las cifras de empleo para abril y se estima que la contracción podría llegar al medio millón de empleos, lo que significa borrar todo el avance del sexenio en materia de empleo. La tasa de desempleo podría superar los 4.5%, no vista desde octubre de 2015.
Estados Unidos también tendrá el peor mes de abril en la historia, con cifras adelantadas del Servicio de Impuestos Interno, 22 millones de personas han reclamado subvención de desempleo, está es la mayor cifra de toda la historia y equivaldría a que la tasa de desempleo alcance el 14%, mayor a la registrada en la gran recesión de 2008, significa que en un mes se borraron 10 años de avances en materia laboral. Lo anterior va a significar una caída del Producto Interno Bruto del 4%; para Europa la contracción promedio es del 6%, aunque países como España e Italia, los más afectados, sería entre 12 y 13%.
Posterior a esta crisis, la peor en la historia del capitalismo, los fundamentos económicos cambiarán rotundamente. Estamos viendo cosas nunca vistas, como la caída de los precios a niveles negativos de un bien fundamental como el petróleo, pero también el cambio en las estructuras de todos los sectores económicos. Estados Unidos perderá la hegemonía y veremos el afianzamiento de un mundo tripolar donde Rusia y China ganarán cada vez más posiciones.
Como se observa, a pesar de que muchos detractores desearían el mal de nuestro país y algunos organismos apuntan a que México sería la economía más golpeada de Latinoamérica, la caída no sería tan grande como la Estados Unidos o Europa.
Si el empleo es el motor de la economía y el gobierno ha propuesto crear 2 millones de puestos para lo que resta del año, la recuperación sería más rápida que en otros países, todo dependerá del momento en que se levante el confinamiento. Si, como se ha dicho, se empieza a levantar la primera semana de mayo, las consecuencias serían menos negativas, si por el contrario se alarga más tiempo los daños serán más profundos. De ello depende que mostremos unidad y disciplina, si cumplimos cabalmente el aislamiento en estos días, lograremos disminuir más rápidamente el ritmo de contagios y la recuperación económica vendrá más pronto; confiemos en las autoridades sanitarias que son reconocidos científicos nacionales.
*Profesor-Investigador Facultad de Negocios, Universidad La Salle México
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores
Twitter: @BandalaCarlos
