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Parece que la salud del popular guitarrista de Queen, Brian May, está pasando por una mala racha, pues luego de haberse lesionado el glúteo haciendo jardinería, el británico confesó que tuvo que ser intervenido de urgencia tras sufrir un ataque cardiaco.
A través de sus redes sociales, May compartió con sus seguidores que todo mayo ha sido una “saga” de incidentes contra su salud, empezando con el desgarre de muslo que le provocó fuertes dolores y la imposibilidad de sentarse o dormir cómodamente.
El guitarrista indicó que una semana después del accidente en su jardín, se hizo una resonancia magnética que reveló que tenía un nervio ciático comprimido en la columna vertebral, lo que le daba la sensación de que alguien le ponía “un destornillador en la espalda”.
Sin embargo, mientras aún padecía los dolores de glúteo, May reveló que su doctor lo llevó de emergencia al hospital porque sufrió un ataque al corazón; de hecho, el integrante de Queen confesó que pasó 40 minutos sintiendo dolores y opresiones en el pecho hasta que llegó el infarto.
El músico explicó que los doctores lo tomaron como un caso de emergencia, pues el examen arrojó que tenía tres arterías tapadas.
“En realidad resultó que tenía tres arterias que estaban congestionadas y en peligro de bloquear el suministro de sangre a mi corazón”, dijo el artista.
Al momento, Brian May indicó que salió del hospital sintiéndose bastante bien y que en vez de hacerse un bypass cardíaco triple decidió colocarse tres stents para mantener una arteria abierta.
