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Corea del Norte confirmó haber destruido mediante una explosión la oficina de enlace que operaba con el Sur en la ciudad fronteriza de Kaesong, en medio de una nueva escalada de tensión entre los dos países.
De acuerdo con una nota de la Agencia Telegráfica Central de Corea (KCNA), el personal en el campo "destruyó completamente la oficina de enlace conjunta Norte-Sur en la Zona Industrial de Kaesong debido al corte de todas las líneas de comunicación entre el Norte y el Sur".
El comunicado atribuye esta acción a "la furia popular" y a la necesidad de "asegurar que la escoria humana y aquellos que les protegen paguen caro por sus crímenes".
"A las 14:50 (GMT+9), una explosión terrible redujo la oficina de enlace a ruinas trágicas", dice la nota.
El ministro de Unificación surcoreano, Kim Yeon-chul, citado por Yonhap, dijo que la detonación de la oficina en Kaesong es "en parte, algo anunciado" por Corea del Norte. "Necesitamos estudiar la situación en detalle", agregó.
La escalada de tensión en la península coreana centra una reunión del Consejo de Seguridad Nacional en Seúl que comenzó a las 17:15 (8:15 GMT), según un portavoz de la Casa Azul.
Por la mañana se supo que Pyongyang estudia la opción de enviar sus tropas a la zona desmilitarizada en la frontera intercoreana.
En la Declaración de Panmunjom, en abril de 2018, las dos Coreas proclamaron el objetivo de desnuclearizar por completo la península, poner fin a las acciones hostiles, reanudar las reuniones de las familias separadas por la guerra de 1950-53 y mejorar las relaciones bilaterales, incluyendo la apertura de una oficina de enlace conjunta en la ciudad fronteriza de Kaesong. En septiembre del mismo año, ambos países firmaron un acuerdo militar encaminado a continuar la política de distensión.
A principios de este mes, Corea del Norte amenazó con cancelar el acuerdo de 2018 sobre la desescalada militar y suspender los intercambios con el Sur. El 8 junio, cortó las líneas de comunicación civiles y militares con la nación vecina, a la que acusa de poner "excusas" en vez de parar a desertores y activistas que lanzan folletos de propaganda hostil a través de la línea fronteriza.
