Alrededor de 335 niños migrantes podrían ser separados de sus padres este viernes en EEUU luego de que un juez federal evitara pronunciarse sobre si las personas detenidas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en centros de detención familiar deberían ser liberados, advirtió el martes a Sputnik el ex vicecónsul de Guatemala en el estado de Colorado (oeste), Percy Peña Riley.
"Un juez acaba de parar una orden donde se permitía que los niños se quedaran con sus padres; si esta orden es atrasada, los niños volverán a ser separados de su familia; esto pone a los menores de edad en una situación de aún mayor vulnerabilidad", dijo a esta agencia Peña Riley.
El ex vicecónsul también es asesor del diputado guatemalteco Aldo Dávila, del partido opositor Winaq (izquierda) e integrante de la Comisión del Migrante en el Congreso.
El 26 de junio, una jueza federal ordenó que este viernes fueran liberados los niños detenidos con sus padres en los centros de detención de EEUU, y criticó la detención prolongada de familias por parte del Gobierno del presidente Donald Trump durante la pandemia de coronavirus.
Sin embargo, el lunes un juez federal dijo que no se pronunciará hasta mediados de la próxima semana sobre si los padres migrantes detenidos por ICE en centros de detención familiar deberían ser liberados, lo que provocaría que los niños sean separados de su familia.
Shalyn Fluharty, directora del Proyecto Dilley Pro Bono, un grupo que representa a los padres migrantes en el Centro Residencial Familiar de Dilley, Texas, dijo que debido al aumento de covid-19 en las instalaciones del ICE, algunos padres podrían elegir separarse, informó el canal NBC en su página web.
"Tenemos padres que quieren separarse porque creen que de otra manera sus hijos morirán (…) Estos padres no saben absolutamente nada sobre lo que sucederá con sus hijos" después de que sean liberados, dijo Fluharty, y señaló que el Gobierno no se ha comprometido a permitir que los niños permanezcan en EEUU o soliciten asilo.
Unos 103.000 menores de edad permanecen retenidos en centros de detención de inmigrantes de EEUU, una cifra récord a nivel mundial, según un estudio de Naciones Unidas de noviembre del año pasado.