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Estados Unidos registró un récord de más de 77.000 nuevos casos de COVID-19 en las últimas 24 horas, lo que eleva el número total de infecciones a 3.560.364, según un recuento de la Universidad Johns Hopkins.
Mientras tanto, el número de fallecidos aumentó en 974, elevando el total del país a 138.201.
El estado de Florida, actual epicentro del brote en el país, informó el jueves un récord de 156 muertes por COVID-19 y aproximadamente 14.000 nuevos casos.
Estados Unidos sigue siendo la nación más afectada del mundo en términos absolutos. Los expertos han advertido que los casos pronto podrían superar los 100.000 al día si el país no toma las medidas necesarias para detener la propagación del virus.
