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Investigadores de la Universidad de Utah, Estados Unidos, descubrieron que el cabello puede revelar la dieta y el estatus social de una persona.
A través de un estudio publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, el equipo de expertos detalló que desde hace 30 años comenzaron a investigar si las partículas de los alimentos podían quedarse impregnadas en el cabello, con el fin de estudiar las dietas de individuos y el comportamiento que tienen en la sociedad.
Así, tras décadas de investigación, los científicos llegaron a la conclusión de que algunos tipos de comida contienen isótopos, los cuales se descomponen durante la digestión volviéndose aminoácidos, fijándose en diferentes partes del cuerpo, incluyendo el cabello.
Para poner en práctica su teoría, los investigadores analizaron los residuos de cabello de 700 personas que se lo hubieran cortado en 65 diferentes ciudades de Estados Unidos, logrando analizar desde los alimentos que ingirieron en horas previas hasta cuánto pagaron por el corte.
En su estudio, los científicos descubrieron que los individuos que tenían una “señal isotópica de maíz” provenían de áreas pobres, debido a que en estas zonas se alimentan a los animales con este tipo de grano, mientras que aquellos que tuvieron altos porcentajes de carbono y nitrógeno en sus muestras estaban más propensos a padecer obesidad y eran de un poder adquisitivo bajo.
En otro punto los científicos destacaron que esta forma de análisis podría ayudar a conocer la dieta de personas que murieron hace cientos de años, así como modificar la forma en la que se hacen las encuestas alimenticias.
Al momento, el equipo continuará estudiando el cabello de las personas y de algunos chimpancés, en donde se puede detectar cuál es el animal dominante.
