.gif)
En México tenemos muchas expresiones propias de nuestra gente. Contamos con una amplia variedad de palabras para expresar asombro, risa, frustración y hasta enojo, pero todas tienen un origen que deberíamos conocer.
En este caso nos enfocaremos al “chido”, palabra que no solo jóvenes, sino adultos y hasta abuelitos tienen muy marcada en su vocabulario.
El “chido” se deriva de una jerga asturiana que incluye en sus términos la palabra “xidu”, que significa bueno o bello, expresión que pasó al habla gitana como “chiro”, que para ellos significaba “resplandeciente”.
En 1939, con el exilio español hacia México, esta palabra llegó a nuestro país y se comenzó a popularizarse, aunque el “chiro” era usado especialmente para expresar de manera positiva algún tipo de asombro.
Con el paso de los años se fue eliminando la “r” y se colocó la “d” para hacer cada vez más popular la palabra “chido” en el vocabulario de los mexicanos, expresión que ya fue incluida en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española.
Para los mexicanos, el “chido” denota algo o alguien que es bueno, bonito o agradable. ¡Qué chido!
