Ante la falta de acceso universal al sistema de salud y la crisis sanitaria ocasionada por el coronavirus, habitantes de Estados Unidos están consumiendo antibióticos para peces para prevenir enfermedades.
Un estudio publicado en el portal Journals indicó que un determinado grupo de ciudadanos está recurriendo a medicamentos para animales, principalmente peces, para tratar enfermedades, principalmente porque estos antibióticos son más económicos y fáciles de conseguir.
Esta situación, de acuerdo con los especialistas, provoca problemas relacionados con la resistencia microbiana, lo que con el tiempo ha costado la vida de 25,000 personas en Estados Unidos, debido a que “ya no tienen modo de curarse” tras someterse a varios tratamientos sin receta.
Los investigadores explicaron que los antibióticos que se usan para tratar a los peces y otros animales tienen una composición química diferente a los que consumen los humanos y que son regulados por las autoridades sanitarias; además, los científicos indicaron que actualmente no hay una regulación sobre el uso de antibióticos, de ahí que el consumo de cualquier medicamento de este tipo para humanos y animales se haya descontrolado.
Ante este estudio, especialistas han señalado que hay un serio problema en Estados Unidos con respecto a los precios y manejo de medicamentos, como el toxicólogo Andrés Lugo Morán, quien mencionó que la tasa de mortalidad de personas que consumen antibióticos para animales, falsos o sin prescripción, podría ser superior a los pacientes que mueren por cáncer.
Al momento, se desconoce si las autoridades tomarán cartas en el asunto sobre el consumo de antibióticos para animales, pero la mayoría de los participantes el estudio señaló que recurre a esta medida por ser más económicas y visiblemente iguales a las pastillas que toman los humanos.