Genoburra y Manzanita, fractura en el paraíso

Genoburra y Manzanita, fractura en el paraíso

La cruda electoral en Burrolandia dejó festejos, enojos y sobre todo lágrimas de los grandes perdedores. Uno de estos fracasados es Té de Manzanita, que ve cómo se destruye su Solidario Encuentro.

 

La historia sucede en las oficinas de Té de Manzanita

 

Secretaria: ¿Señor Manzanita, sigue aquí?

 

Manzanita (Llorando): ¿Qué quieres? ¡Te dije que quería estar solo!

 

Secretaria: ¡A poco está llorando!

 

Manzanita: ¡Claro que no! ¡Solo se me metió un “perdimos el registro” en el ojo! ¿Qué te hace pensar que estoy llorando?

 

Secretaria: Pues los gimoteos que está dando, ya chole. Los vecinos llamaron a Protectora de Animales porque dicen que están maltratando a un cuino.

 

Manzanita (Con llanto incontrolable): ¡Ya vete, déjame en paz! ¡No quiero ver a nadie! ¡Los odio a todos, los odio!

 

Secretaria: Bueno, es que también lo busca alguien, dice que le urge hablar con usted.

 

Manzanita (Sonándose la nariz): ¿Quién es? ¿Unos votos? ¿Unas prerrogativas?

 

Secretaria: No, es la seño Genoburra en la Huerta.

 

Genoburra (A lo lejos): Seño diputada federal, aunque te cueste más trabajo.

 

Manzanita: Mi amiga, Genoburra. Dile que pase y luego puedes irte. Es más, ya no regreses (comenzando a llorar), ya no hay dinero para pagarte.

 

Genoburra: Hola, amigo, Qué bonito día hace hoy. ¿A poco no?

 

Manzanita: ¿Bonito? ¡Amiga, perdimos y perdimos feo! Ni mi familia votó por nuestro solidario encuentro, pero al menos nosotros seguimos unidos. Hay que ver qué sigue en nuestro plan de apoderarnos de Burrolandia.

 

Genoburra: Esteee. Híjole, amigo, cómo te explico. Es muy difícil para mí, pero creo que hasta aquí llegamos.

 

Manzanita: No puedes hacerme esto, Genoburra. Yo te puse donde estás, por mí irás a sentarte tres años en la Cámara de Burrodiputados. No seas malagradecida y traicionera.

 

Genoburra: Para empezar, lo de irme a sentar tres años es una mentira. Recuerda que el área de la botanita y el cafecito está lejos de las curules y debo levantarme. ¡Mira qué buena idea me diste! Mi primera iniciativa será contratar meseros para que nos sirvan la botana y los chescos.

 

Manzanita: ¡Traicionera! ¡Malagradecida!

 

Genoburra: Si ya sabes cómo soy, pa’ qué me invitas. Además, logramos el cometido. Aunque ganamos varios puestos, dejé hecho un desastre el PAN de Burro. ¿No es lo que queríamos?

 

Manzanita: ¡Pero no a costa de mi desgracia! ¡Ni de chalán de regidor me van a dar trabajo!

 

Genoburra: Ya no te preocupes, yo necesito quién me lleve café y galletitas en la Cámara de Burrodiputados, si no me voy a aburrir. Ya mejor me largo, que aquí huele a partido sin registro.

 

Manzanita: ¡Me las vas a pagar, Genoburra! ¡Me voy a vengar! ¡Esto no se queda así!

 

(Abren la puerta)

 

Burrislas: Buenas, buenas, aquí pidieron una pizza de perdedores, digo, de pepperoni.

 

Manzanita: ¡Gerry Burrislas! ¿Eres tú? ¿Qué haces repartiendo pizzas?

 

Burrislas: ¡Manzanita! Pues ya ves, hice mi propio partido “Burros a la Fuerza”, entré a las elecciones y… bueno, hasta tu candidato tuvo más votos que nosotros.

 

Manzanita: Sé por lo que estás pasando, Burrislas. Pero ya debería estar acostumbrado al fracaso, es más, hazte a la idea que va a quebrar tu negocio de pizzas.

 

Burrislas: Ahí sí estás bien equivocado, Manzanita.

 

Manzanita: N lo creo.

 

Burrislas: Porque el negocio ni es mío, solo soy el repartidor. Además, estoy a prueba apenas y seguro al rato me corren porque no sé dónde dejé tu pizza.

 

Manzanita: ¡Déjate de tonterías y unamos fuerzas! Tenemos todo para triunfar. Con mi marrullería y tu nulo miedo a hacer el ridículo, a quedar como payaso, a ser el hazmerreír de todos, a fracasar hasta en las canicas, a ser corrido de todas partes…

 

Burrislas: ¡Ya párale, Manzanita! Hasta parece que soy el nuevo “Don Fracaso”

 

Manzanita: ¡Eso! Desde hoy te nombro “Don Fracaso Reloaded”. Tú serás mi mano derecha desde hoy. Juntos haremos historia… ¡Oye, qué buen eslogan acabo de inventar!

 

Burrislas: Sí, sí, como digas. Oye, ¿me vas a pagar la pizza? Tira paro, que si no me van a correr y apenas llevo media hora trabajando…

 

Manzanita: Oye, ¿de casualidad necesitan otro repartidor?