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Los casos positivos de COVID-19 en África están aumentado 20 por ciento semanalmente cuando la mayoría de los países en el continente están entrando en una tercera ola de contagios, señalo hoy jueves una funcionaria de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Matshidiso Moeti, la directora regional de la OMS para África, dijo que el continente está inmerso en la tercera ola de contagios del coronavirus que podría agobiar los ya frágiles sistemas de salud pública.
"África está en medio de una verdadera tercera ola. La seria trayectoria del aumento de casos debe incitar a todos a la acción urgente", dijo Moeti en un comunicado, y añadió que las medidas de salud pública deben ser intensificadas rápido para encontrar, examinar, aislar y cuidar a los pacientes y rastrear rápidamente a sus contactos.
Las estadísticas de la OMS indican que los nuevos casos de COVID-19 en África aumentaron en más de 116.500 en la semana que terminó el 13 de junio, cantidad superior a los 91.000 casos de la semana previa, en medio de un mes de aumentos que ha incrementado el total de casos en el continente a más de cinco millones.
Moeti señaló que 22 países africanos experimentaron un incremento superior al 20 por ciento en los contagios de coronavirus en la semana que terminó el 13 de junio, mientras que los decesos se elevaron en 15 por ciento en 36 países en la misma semana.
Comentó que la República Democrática del Congo, Namibia y Uganda han reportado el número más alto de nuevos casos semanales desde que la pandemia fue reportada en el continente.
Moeti dijo que la flexibilización de las medidas contra la COVID-19 combinada con el clima frío en la región del sur de África y las nuevas variantes, son la causa de los nuevos aumentos de casos en el continente. La variante Delta de India se ha reportado en 14 países africanos, mientras que las variantes Alfa y Beta, que se originaron en Reino Unido y Sudáfrica, respectivamente, han sido detectadas en 25 países del continente.
La funcionaria mencionó que la OMS está ayudando a los países africanos a establecer planes de contingencia, incluyendo una vigilancia reforzada, pruebas rápidas y la modernización de instalaciones médicas críticas para permitirles enfrentar los crecientes contagios de coronavirus.
