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Con un rostro de felicidad terminó la poblana Sofía Reinoso su descenso en la semifinal de canotaje slalom, pues a pesar de quedar fuera de la final en la que se disputaron las medallas, hizo historia en el deporte olímpico mexicano.
Al ser la primera kayakista mexicana en participar en la justa deportiva más importante del planeta, su nombre ha trascendido y reafirmó la proeza lograda.
La nacida en Puebla tuvo una buena participación, ya que fue la segunda en salir al descenso y marcó un tiempo de 132.34 segundos en una carrera en la que tuvo que pasar por 25 puertas, con dos penalizaciones de tiempo por contacto.
Esta marca le permitió estacionarse en el lugar 21 de la clasificación y si bien quedó alejada de las primeras diez plazas que daban boleto a la final, su buena labor es de reconocerse, pues además marca un precedente para el canotaje mexicano.
Al respecto, la deportista compartió su sentir en redes sociales y dijo que ha cumplido un sueño con esta contienda, agradeció las muestras de apoyo, apuntó a que va por más dentro de su carrera y dijo que espera que su actuación sea un impulso para el slalom en el país.
En la final, la alemana Ricarda Funk se quedó con la medalla de oro al completar el recorrido de 25 puertas en un tiempo de 105.5. La plata fue para la española Maialen Chourraut, quien había ganado el oro en Río 2016 y la australiana Jessica Fox, se colgó el bronce.
