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Tras la tragedia durante el rodaje de “Rust”, que cobró la vida de Halyna Hutchins, directora de fotografía, e hirió al director Joel Souza, Alec Baldwin quiere que en los sets de filmación estén presentes las fuerzas del orden, a fin de monitorear la seguridad de las armas.
Alec Baldwin cree que la policía está más capacitada para proteger a las producciones cinematográficas, ya que a través de Twitter e Instagram dijo: “Toda película / o serie de televisión que use armas, falsas o no, debe tener un oficial de policía en el set, contratado por la producción, para monitorear específicamente la seguridad de las armas”.
Desde el incidente, Baldwin no se ha quedado callado y de manera continua expresa su opinión respecto de las condiciones laborales en los set, a pesar de que “no se le permite hacer ningún comentario porque es un caso en curso”.
Asimismo, el viernes, Baldwin negó que haya disparado de manera intencional a Hutchins porque estaba “preocupado” y “volátil”, como acusó el expresidente Donald Trump, a quien el actor satirizó en “Saturday Night Live” y con quien peleó durante años. Además rechazó las versiones de varios medios sobre que estaban “sobrecargados de trabajo y rodeados de condiciones inseguras y caóticas”.
En tanto que el equipo legal de Hannah Gutiérrez Reed, la armera de la cinta, argumenta que fue saboteada y sugiere que alguien pasó de contrabando, de manera intencional, rondas de munición real en una caja de balas ficticias antes de que Hutchins fuera asesinada.
Aunado a ello, Lane Luper, excamarógrafo de “Rust”, de quien se dijo que abandonó el set después de estar harto de las condiciones de trabajo inseguras e irrazonables, dijo a CNN que el argumento de Gutiérrez era “peligroso” e “irresponsable”.
Hasta el momento se sabe que Gutiérrez Reed ingresó al set de la iglesia donde se ensayaba para filmar una escena de tiroteo con las armas de fuego. Ella verificó la Colt .45 frente a Dave Halls, primer asistente del director, quien dijo que pensó que vio tres rondas dentro del arma; sin embargo, admitió que no las revisó antes de tomar la pistola.
Por ello, “debería haberlos revisado todos; pero no lo hizo, y no podía recordar si ella hizo girar el tambor”, según consta en una declaración jurada de orden de registro presentada el 27 de octubre por la Oficina del Sheriff del condado.
