Enfermeras, las guerreras incansables de la pandemia

Enfermeras, las guerreras incansables de la pandemia

Foto: Enfoque

Este 6 de enero se celebra en México el Día de la Enfermera y del Enfermero, profesión que pese a su gran importancia en los servicios de salud, muchas veces es minimizado ante la labor que llevan a cabo los doctores.

 

 

Una enfermera representa la imagen humana que todo paciente ve en el momento de estar en un nosocomio. Muchas veces, estas trabajadoras se convierten en una válvula de escape de emociones de todas esas personas que pasan por un problema de salud.

 

Las jornadas de trabajo de las enfermeras son muchas veces intensas y sin descanso, lo que se ha visto en mayor medida durante la presente pandemia de COVID-19, donde las enfermeras se han convertido en verdaderas guerreras incansables.

 

La labor de las enfermeras en la crisis sanitaria que se vive en México es titánica y loable, pues han estado al pie del cañón ayudando de cerca a los médicos a combatir al COVID-19, perdiendo muchas veces batallas dolorosas.

 

Incluso, las enfermeras se han visto afectadas en su propia salud durante la presente pandemia, donde el 40 % de los contagios que se han dado en personal de salud corresponde a estas trabajadoras.

 

 

Y es que en México se ha visto que muchas enfermeras han enfrentado valientemente al COVID-19 sin el equipo de protección necesario, sufriendo también el desdén de las autoridades federales, que no han ayudado a que lleven a cabo su labor de manera segura.

 

Se podría decir que las enfermeras son el personal de salud más afectado durante la pandemia por diversas razones, incluyendo la cerrazón de mente de muchos ciudadanos, que las ven como fuente de contagio.

 

La ignorancia infinita de muchas personas ha provocado que muchas enfermeras sufran agresiones injustas, al grado que algunas han sido golpeadas, rociadas con cloro o incluso expulsadas de sus propias viviendas.

 

Por estos motivos, el Gobierno Federal debería comprender que más que medallas inútiles, las enfermeras y enfermeros necesitan un mayor apoyo para seguir combatiendo en la primera línea al COVID-19.

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