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Las escuelas de samba que desfilan en el carnaval de São Paulo (sureste de Brasil) propusieron el lunes una serie de protocolos para hacer viable la fiesta, prevista para finales de febrero, ante la pandemia de covid-19.
En una reunión con autoridades municipales, la Liga-SP, que agrupa a las principales escuelas, propuso hacer los desfiles con una limitación de público (al 70 por ciento de la capacidad total de las gradas), según recoge el portal G1.
También se propuso reducir el número de componentes (las personas que desfilan disfrazadas), que pasaría de 2,000 a 1.500 por cada escuela, y además todos ellos deberían usar barbijo.
Las propuestas fueron bien recibidas por los representantes del ayuntamiento, que harán otras reuniones hasta anunciar la decisión final este jueves.
El carnaval de las escuelas de samba de São Paulo se realiza en el Sambódromo de Anhembi, un recinto similar a un campo de fútbol, donde es posible controlar el número de asistentes.
El carnaval de calle, integrado por los "blocos" (comparsas callejeras) que desfilan por la ciudad y arrastran a millones de personas, fue cancelado debido a la pandemia, tanto en São Paulo como en la gran mayoría de capitales del país.
