“Alcalde” de Coronango, el apestado

“Alcalde” de Coronango, el apestado

Coronango es una bomba de tiempo a punto de explotar, debido al terrible gobierno del fantasma Gerardo Sánchez Aguilar, quien desde ya es el “apestado” de la zona metropolitana.

 

A las pruebas me remito.

 

El pasado miércoles se llevó a cabo la Jornada Metropolitana de Servicios Públicos, encabezada por los alcaldes de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, y de San Andrés Cholula, Edmundo Tlatehui Percino.

 

Lalo y Mundo han llevado a cabo un buen trabajo en sus municipios, de eso no hay duda, por lo que compartieron esta buena idea con un alcalde medianito como Filomeno Sarmiento, de Cuautlancingo, y con un desastre como es Paola Angon, de San Pedro Cholula.

 

Pero el que ni de chiste fue incluido fue el fantasma Sánchez Aguilar. Obviamente, resultaría una mala imagen tener a este señor en un acto tan serio. Es más, hasta para Paola Angon sería un quemón.

 

Con justa razón, Sánchez Aguilar ya es el “apestado” de la zona metropolitana y si las cosas siguen igual en Coronango, será el enemigo público de este municipio, sometido por la inseguridad, el narcomenudeo y otros problemas que aquejan a la población.

 

No le miento, amable lector, amigos que viven en este municipio me dicen que ya la piensan dos veces antes de salir hasta al Oxxo después de las 8 de la noche.

 

Gerardo Sánchez Aguilar va que vuela para engrosar las filas de los alcaldes que no pudieron con el paquete y que tendrán un final prematuro en su aventura de gobernar un municipio.

 

Mientras tanto, la sociedad de Coronango experimenta en carne propia el miedo que se vive en localidades en guerra y sin ley.

 

“Gerry” da patadas de ahogado

 

El otrora rockefeller del Congreso, Gerardo Islas Maldonado, suda frío en estos momentos. Nadie le creyó el mensaje que emitió con el que busca lavarse las manos del desfalco hecho por Fuerza por México al INE.

 

Tal vez, “Gerry” pueda seguir mostrando una fingida seguridad, pero no toma en cuenta que tiene una deuda pendiente con el desvío de recursos que se dio en la reconstrucción del sismo de 2017 y donde su nombre está en todas partes.

 

Ojo, viene un nuevo titular de la Auditoría Superior del Estado (ASE), que sin dudarlo retomaría la investigación de estos actos de corrupción y, entonces sí, que Islas Maldonado le rece a todos los santos.