Al menos siete personas, entre ellas dos niños, murieron a causa de una tormenta de arena en la gobernación de Deir ez-Zor, en el este de Siria, comunicó este martes la agencia de noticias kurda ANHA.
Según precisó el medio, la tormenta quitó la vida a siete refugiados en el campamento de Abu-Khashab, situado en Deir ez-Zor. Entre los muertos hay dos menores de edad y una mujer.
El domingo, la tormenta azotó las regiones del norte y el este de Siria reduciendo el alcance visual. Como consecuencia, se registraron numerosos accidentes viales y las autoridades tuvieron que cerrar las carreteras.
El lunes, una fuerte tormenta de arena fue registrada en el vecino Irak, donde unas 4.000 personas sintieron asfixia. La baja visibilidad obligó a cerrar provisionalmente el Aeropuerto Internacional de Bagdad y otras tres terminales aéreas.
Ese mismo día en Kuwait, por las mismas razones, fueron cerrados el aeropuerto capitalino y tres puertos marítimos.
A su vez, el servicio meteorológico de Arabia Saudí informó a través de las redes sociales a la población sobre una tormenta de arena que se avecinaba en las regiones orientales del país.