Israel consideró hoy que las pruebas realizadas en la bala que mató a la periodista de Al Jazeera Shireen Abu Akleh no pudieron determinar si fueron soldados quienes le dispararon debido al "estado físico" de la misma.
Un examen de balística realizado en un laboratorio forense de Israel por expertos israelíes no logró llegar a una conclusión definitiva sobre el origen de la bala que mató a la reportera palestino-estadounidense, señaló el Ejército israelí en un comunicado.
"El estado físico de la bala y la calidad de las características en ella no permiten que un examen de balística determine de forma concluyente si la bala fue disparada o no desde el arma que fue examinada", reza el texto.
La bala permaneció bajo custodia del coordinador de seguridad de Estados Unidos para Israel y la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Michael R. Fenzel, después de recibirla de las autoridades palestinas hasta que fue devuelta el domingo luego de concluir el examen.
Representantes del coordinador de seguridad de EE. UU. también estuvieron presentes durante el examen de balística.
El Departamento de Estado de EE. UU. señaló este lunes que es probable que disparos provenientes de posiciones israelíes hayan matado a Abu Akleh, pero investigadores independientes no pudieron ofrecer una respuesta concluyente respecto del origen de la bala.
A fines de mayo, la ANP anunció que su investigación reveló que Abu Akleh fue baleada "deliberadamente" por un francotirador israelí, pero el Estado judío ha negado esto.
Una investigación israelí anterior concluyó que ningún soldado israelí "disparó deliberadamente a la Sra. Abu Akleh". De acuerdo con Israel, la periodista estuvo bajo fuego durante un tiroteo entre fuerzas israelíes y palestinos armados.