Inmigrantes en Nueva York podrían ser alojados en un enorme crucero de lujo

Inmigrantes en Nueva York podrían ser alojados en un enorme crucero de lujo

Foto: Pixabay

La llegada de varios inmigrantes a la ciudad de Nueva York ha provocado que el alcalde, Eric Adams, busque un acuerdo para que un crucero noruego los aloje durante un tiempo. De acuerdo con un medio local, el mandatario tiene la intención de alquilar una embarcación de lujo por al menos seis meses.

 

La compañía Norwegian Cruise Line será la encargada de proporcionar la nave que alojará a los inmigrantes que entren en el sistema de acogida de la ciudad, además, se pretende anclarla en el puerto del distrito de Staten Island.

 

Las estimaciones preliminares señalan que este sería el plan “más barato”, en comparación con la instalación de un hangar con carpas, que podría generar un gasto de 15 millones de dólares al mes.

 

Desde mayo, han llegado a Nueva York cerca de 15,000 inmigrantes, aunque según Adams, la cifra podría ascender hasta las 75,000 personas. El gobernador aseguró que el flujo de gente está poniendo a prueba el sistema de refugios hasta “su punto de ruptura”.

 

 

Por otro lado, también se especula con que las autoridades están negociando el posible uso de otro barco, propiedad de la compañía Tallink, que recientemente fue usado para reubicar a refugiados ucranianos.

 

Adams también ha solicitado a la Casa Blanca al menos 500 millones de dólares en fondos de emergencia para poder solventar los servicios destinados a inmigrantes durante un año. En este sentido, el presidente del distrito de Staten Island, Vito Fossella, ha señalado que el muelle propuesto por el alcalde es “problemático” porque ahí no hay electricidad, lo que lo hace “insostenible”.

 

Además, la congresista republicana por Nueva York Nicole R. Malliotakis, a criticado la iniciativa. "Tanto (el presidente Joe) Biden como Adams se niegan a abordar la raíz del problema y, en cambio, siguen incentivando la inmigración ilegal", dijo.

 

La congresista calificó la idea como “ridícula” y aseguró que solo podría ocurrírsele a “una administración incompetente”.

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