El gigante tecnológico Google ha sido demandado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos y ocho estados del país. El motivo de este proceso legal es que consideran que la empresa abusa ilegalmente de su dominio en la publicidad online, lo que quebranta la Ley Sherman Antimonopolio.
De acuerdo con la acusación, "la competencia en el estado de la tecnología publicitaria ha sido interrumpida por razones que no fueron ni accidentales ni inevitables", en este sentido, se afirma que Google "ha corrompido a la competencia legítima en la industria de la tecnología publicitaria al participar en una campaña sistemática para tomar el control de la amplia gama de herramientas de alta tecnología utilizadas por editores, anunciantes y corredores, para facilitar la publicidad digital".
Al respecto, el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Gargland, explicó que Google prácticamente controla la tecnología que utilizan casi todas las webs con espacios publicitarios.
Este control causa que los sitios ganen menos dinero por incluir anuncios, mientras que los anunciantes deben pagar más por su presencia en ellos. Esta práctica “excluyente” ha dificultado que haya competencia en la industria publicitaria online.
El Departamento de Justicia busca que la empresa elimine su plataforma de gestión de anuncios Google Ad Manager. Esto supondría un problema para Google, ya que genera la mayoría de sus ingresos gracias a la publicidad. Tan solo en 2021, un 81 % de los 209,000 millones de dólares que ganaron provenía de los anuncios.
De acuerdo con Gargland, la firma ha ganado 30 centavos por cada dólar invertido por anunciantes que utilizan las herramientas de Google, aunque se piensa que los beneficios pueden ser “significativamente” mayores.