La toxina botulínica es una proteína neurotóxica que comercialmente se conoce como botox, una sustancia que está siendo utilizada con fines cosméticos para prevenir los signos de envejecimiento, como pueden ser las arrugas.
Aunque no se trata de una sustancia nueva, se está volviendo cada vez más popular en el mundo, pues muchas mujeres consideran que es la mejor manera de retrasar el envejecimiento y en algunos casos, de detenerlo, aunque sus esperanzas no sean del todo ciertas.
¿Qué es el botox?
Esta toxina funciona a través de inyecciones que se aplican en algunos puntos donde aparecen comúnmente los signos de expresión, limitando el movimiento de la piel a través del bloqueo de la acetilcolina.
En palabras más sencillas, el botox funciona como hielo que provoca que se congelen algunos músculos faciales para evitar que aparezcan las arrugas, o que cuando estas ya están, la piel se estire para reducir su presencia.
Anteriormente, quienes usaban botox eran mujeres mayores de 40 años que comenzaban a mostrar algunos signos de envejecimiento, y en su afán por disminuir estas arrugas utilizaban la toxina para estirar su piel.
Actualmente, la brecha de las usuarias comienza a disminuir la edad, pues han surgido teorías que suponen que si usas botox cuándo eres más joven, al llegar la edad de las arrugas estas no aparecerán, situación que no es cierta.
Las líneas de expresión aparecerán sin importar que uses botox desde una edad corta, por lo que esto está provocando que muchas mujeres abusen de esta toxina sin importar los riesgos médicos que pueda tener.
Ejemplos de un abuso del botox se pueden ver en muchas partes, aunque son las figuras públicas quienes sirven mejor para demostrarlo, como Madonna, quien este fin de semana fue criticada duramente en redes sociales por los evidentes cambios físicos que mostró durante la entrega de los Grammys.
A pesar de que hay otras formas de prevenir los signos de envejecimiento, como puede ser el retinol o algunos protectores solares, los cuales aumentan el colágeno en la piel, los consultorios cosméticos promueven el botox porque es más costoso.
El precio
Un buen tratamiento de botox, con un médico certificado y un producto de calidad, ronda actualmente entre los 9,000 y los 15,000 pesos, aunque se han detectado tratamientos más accesibles que rondan los 5,000 pesos.
Las tiendas online también han promovido el uso del botox, pero con el riesgo de una mala aplicación, pues muchas mujeres creen que lo pueden hacer desde la comodidad de su casa y sin personal médico que esté supervisándolo.
Sin importar si el tratamiento es económico o costoso, actualmente hay estudios que aseguran que muchas mujeres que usan botox una vez en su vida, repiten el procedimiento por lo menos una vez más.
