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México tiene en sus niños uno de sus principales problemas de salud pública en la actualidad, la diabetes infantil. Este padecimiento es diferente en los menores porque sus cuerpos aún están en desarrollo y los desgasta más rápido que a los adultos, así lo afirmó un especialista.
Armando Acevedo Méndez es doctor con especialidad en ortopedia y afirmó en entrevista para Imagen Poblana que en Puebla, a raíz de la pandemia, se incrementaron los hábitos de sedentarismo, por lo que la estimación de incidencia en diabetes infantil se elevó 35 %. Según cifras oficiales, en México hay más de 500,000 casos de diabetes en menores
A su punto de vista, este padecimiento preocupa más en este sector de la población porque su tratamiento es principalmente con insulina y termina desgastando a los pacientes más rápido. El doctor aseguró que en estos escenarios se volverán dependientes del medicamento por el resto de su vida.
Él ve en esto un obstáculo para el tratamiento, toda vez que los niños se muestran renuentes a tener que inyectarse una o más veces al día por años para mantener su salud. En un intento por ayudar a los chicos a dejar atrás este miedo, ha implementado técnicas como una obra de teatro titulada “La princesa insulina”, donde se motiva a los menores a continuar con sus tratamientos para reforzar su sistema y desarrollarse con plenitud.
De acuerdo con Acevedo, un punto central para evitar complicaciones es la detección oportuna, pues “cuando ellos están controlados a través de programas alimenticios, pueden manejar esta enfermedad”, sentenció el especialista.
La idea común es que tener esta afección se debe al estado corporal, pues la obesidad está asociada, pero tampoco es extraño verlo en quienes, aparentemente, tienen mejor condición, por lo que también se debe considerar el factor genético.
La diabetes mellitus es un padecimiento crónico degenerativo que se puede heredar y se pasa de generación en generación, por lo que el historial familiar puede ser determinante para saber si un menor es diabético. El especialista agregó que hay otros factores de riesgo como la obesidad, el sobrepeso o padecimientos de cardíacos que potencian la enfermedad. Esto origina complicaciones en otros órganos y sentidos, entiéndase la vista, fallos renales, amputación de pies u otras extremidades, así como problemas del corazón.
Además, especialmente en los infantes, otros factores de riesgo son una mala alimentación o la desnutrición, ya que “si no tiene una dieta balanceada, definitivamente el niño va a quedar vulnerable ante esto”, manifestó nuestro entrevistado.
Respecto a los cuidados a seguir, Armando Acevedo insistió en que la alimentación es crucial para mantenerse sanos; en suma, también exhortó a ejercitarse con regularidad, así como llevar vigilancia continua al estado de salud y cualquier variación repentina. En caso de que se acuda frecuentemente al médico, es vital hacer caso a los llamados a revisión en los tiempos que este dicte.
