Un informe presentado en la víspera de la primera Conferencia sobre el Agua de Naciones Unidas en más de cuatro décadas revela una realidad alarmante: más del 25 % de la población mundial no tiene acceso a agua potable, y casi la mitad carece de servicios básicos de saneamiento.
El Informe Mundial de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo de Recursos Hídricos 2023 pintó un sombrío panorama sobre la situación actual y las enormes brechas que deben cerrarse para lograr los objetivos de la ONU de garantizar el acceso universal al agua limpia y al saneamiento para el año 2030.
Según el informe, la falta de acceso al agua potable afecta a más de 2,000 millones de personas en todo el mundo, mientras que más de 3,600 millones carecen de instalaciones adecuadas de saneamiento. Estas cifras alarmantes resaltan la urgencia de abordar la crisis hídrica global.
Richard Connor, director editorial del informe, subrayó la importancia de invertir en soluciones sostenibles para garantizar el acceso al agua y al saneamiento. Según estimaciones, se requeriría una inversión anual de entre 600,000 millones y un billón de dólares para alcanzar los objetivos de la ONU. No obstante, Connor destacó que es igualmente crucial establecer alianzas con inversores, entidades financieras, gobiernos y comunidades afectadas por el cambio climático para asegurar que los fondos se utilicen de manera eficiente y sostenible.
2.000 millones de personas no tienen acceso al agua potable.
— Naciones Unidas (@ONU_es) May 22, 2023
La #AcciónPorElAgua supone garantizar el acceso al agua segura, accesible y asequible para todos en todas partes. https://t.co/DkuBrN6OAZ pic.twitter.com/UBMz11A8HN
El informe también revela que el consumo de agua a nivel mundial ha aumentado aproximadamente un 1 % anual en las últimas cuatro décadas, y se prevé que esta tendencia continúe hasta 2050. Este incremento se debe al crecimiento demográfico, el desarrollo socioeconómico y los cambios en los patrones de consumo. Además, se destaca que el aumento en la demanda de agua está ocurriendo principalmente en países en desarrollo y economías emergentes, especialmente en las zonas urbanas.
La agricultura, que utiliza el 70 % del agua a nivel mundial, se identifica como un sector clave en el que se deben implementar prácticas más eficientes. El informe destaca la importancia del riego por goteo, utilizado en algunos países, como una técnica que permite un uso más eficiente del agua, asegurando así que haya suficiente disponibilidad para las necesidades de las ciudades.
Por otro lado, el cambio climático agrava la situación, ya que se espera que la escasez estacional de agua aumente en regiones actualmente abundantes en recursos hídricos, como el centro de África, el este de Asia y partes de Sudamérica. Además, las áreas que ya enfrentan escasez de agua, como Oriente Medio y el Sahara africano, se verán aún más afectadas.
Este informe de la ONU sirve como una llamada de atención para la comunidad global, instando a una acción urgente y coordinada para abordar la crisis hídrica. La falta de acceso al agua potable y al saneamiento básico tiene consecuencias devastadoras para la salud, la seguridad alimentaria y el desarrollo socioeconómico de las comunidades afectadas.
Nuestro consumo insaciable está empeorando la crisis del agua.
— Naciones Unidas (@ONU_es) May 20, 2023
La buena noticia es que podemos solucionarla. Utiliza el agua de manera responsable, reduce tu huella de carbono y apoya prácticas sostenibles.#ActúaAhora, antes de que sea demasiado tarde: https://t.co/BMjRPTZ8A8 pic.twitter.com/WB9AUK2TFU