De la pantalla a la vida real: series y películas que inspiraron terribles crímenes

De la pantalla a la vida real: series y películas que inspiraron terribles crímenes

Foto: Unsplash

Muchas veces se ha desatado el debate en torno a la influencia de las películas y series en la audiencia, pues hay quienes consideran que contribuyen al fomento de la violencia. En esta ocasión se dio el caso de una mujer en Corea del Sur que admitió cometer un crimen inspirada en series sobre asesinos.

 

Yung Yoo-jung, una joven surcoreana de 23 años, causó revuelo luego de admitir su delito que, asegura, hizo por “curiosidad” sobre los asesinatos. Ella engañó a su víctima acordando un encuentro para supuestas asesorías escolares, por lo que se vieron en casa de la mujer a la que asesinó y desmembró, algo que luego quiso ocultar haciendo que pareciera una desaparición.

 

Yoo-jung cayó gracias a la denuncia de un taxista que declaró haberla llevado al sitio donde hallaron el cuerpo. En su declaración, la joven dijo que llevaba más de un año investigando sobre estos delitos y veía la serie “True Crime”, donde se muestran historias de asesinos seriales reales.

 

 

De hecho, su intento de ocultar el asesinato también lo aprendió en la serie, ya que optó por llevarse todos los documentos de identificación de la víctima, así como su dinero para que pareciera una partida voluntaria y así evitar sospechas. La conmoción del caso radica en que confesara su fuente de inspiración, pero, aunque suene raro, esta no es la primera vez en que se comete un crimen tomando como modelo los hechos de una producción.

 

Uno de estos casos fue el de John Hinckley Jr., quien el 30 de marzo de 1981 cometió un atentado para matar al presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan. Su intención era llamar la atención de la joven actriz Jodie Foster, a quien había acosado durante meses con cartas, poemas y espiándola en su habitación.

 

John Hinckley vivía en Los Ángeles en 1976, año en que se estrenó “Taxi Driver”, película dirigida por Martin Scorsese y protagonizada por Robert De Niro y Jodie Foster, quien a sus 12 años interpretó a una prostituta de Nueva York. Al ser una persona inestable, John se fascinó con la cinta y con la menor de edad. En esta cinta se ve como Travis Bickle (De Niro) intenta asesinar a un candidato a senador luego de que una mujer lo rechazara.

 

El atentado fracasó, pero en su interrogatorio John Hinckley dijo que parte de su inspiración y comportamiento los tomó de la película. La defensa usó esto para liberarlo de los cargos, acusando que, al ser una persona vulnerable, la influencia de la película era el detonante de su actuar. Sus abogados consiguieron que Foster testificara en el juicio, por lo que en un momento estuvieron en la misma habitación, pero ahora ella rechaza cualquier pregunta del tema en entrevistas.

 

 

Algo similar ocurrió el 20 de abril de 1999 cuando los estudiantes Eric Harris y Dylan Klebold, de 18 y 17 años respectivamente, perpetraron una masacre en la escuela secundaria Columbine, en el estado de Colorado, Estados Unidos. Ambos usaron armas semiautomáticas de 9 mm y explosivos caseros, igualmente inspirados en la película “Asesinos por naturaleza”, de 1994 y dirigida por Oliver Stone.

 

Los homicidas se identificaron ese día mediante el código “NBK”, siglas de “Natural Born Killers”, nombre original de la película. Además, en el diario de Eric se hallaron notas referentes a su fijación y admiración por la violencia, indicando que iba en “modo NBK”. Harris también se refirió a la masacre como la “Santa mañana de abril de NBK”, reiterando su afición por la película. Declaró que ese comportamiento era su forma de ser libre de verdad.

 

 

En cuanto a las series, el 17 de diciembre del 2010 Vincent Tabak asesinó a su vecina, la joven paisajista Joanna Yeates en Bistro, Inglaterra. Ella desapareció desde ese día, pero su cuerpo no fue encontrado hasta la navidad, con signos de estrangulación, lo que causó su muerte. Él no fue atrapado hasta el 20 de enero del 2011, pues no se le había relacionado con el crimen por acusar injustamente a Chris Jefferies.

 

Durante sus interrogatorios con policías, Vincent declaró que gracias a la serie “Crime Scene Investigation: CSI”, había aprendido sobre asesinos y formas de encubrir sus huellas de la escena. Además, mencionó que la serie le enseñó técnicas para esconder el crimen. Finalmente se le declaró culpable, pero nunca mostró remordimiento por terminar con la vida de Joanna.

 

A lo largo de su carrera, el director Stanley Kubrick mostró películas polémicas, pero ninguna como “La Naranja Mecánica”, de 1971 y que fue censurada en varios países por la extrema crudeza que exhibía. La historia gira en torno a Alex DeLarge (Malcolm McDowell) y su grupo de amigos, quienes se divierten cometiendo diversos crímenes como golpear indigentes, violando o peleándose con otras bandas.

 

La forma en que Kubrick lo presenta cautivó a los jóvenes de la época, quienes se enfocaron en imitar a los protagonistas. Por meses se registraron varios atracos, peleas y demás fechorías por parte de jóvenes, quienes se agrupaban, vestían y comportaban igual que los estelares de la película de Kubrick. En 1973 una adolescente en Lancashire, Inglaterra, fue violada al mismo tiempo que sus agresores cantaban “Singing in the rain”, igual que en la cinta.

 

La que es considerada como una de las mejores películas de superhéroes de la historia, “Batman: El caballero de la noche” (2008), mostró a un gran villano, el Guasón interpretado por Heath Ledger. Este sirvió de inspiración para que James Eagan Holmes perpetrara una masacre, caracterizado igual que el icónico enemigo de Batman.

 

 

Él era un joven solitario y tímido, pero el 20 de julio del 2012 se decidió a terminar con la vida de 12 personas, además de herir a otras 70 en la localidad de Aurora, en Colorado. “La masacre de Aurora”, como se le conoció al evento, consistió en que llenó una sala de cine con gas lacrimógeno mientras él disparaba a los espectadores usando una máscara antigás. Al momento de su detención se limitó a decirle a los oficiales de policía “I am Joker”. Fue condenado a 12 cadenas perpetuas a pesar de que se le diagnosticaron trastornos sociales y mentales.

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