Desigualdad salarial, el gran pendiente de equidad de género

Desigualdad salarial, el gran pendiente de equidad de género

Foto: FreePik

A pesar de las políticas públicas y los discursos que promueven la igualdad salarial, el trabajo que llevan a cabo las mujeres continúa sufriendo de un claro rezago en materia salarial si lo comparamos con sus pares hombres que efectúan el mismo tipo de actividades.

 

Con la finalidad de visibilizar los esfuerzos que para conseguir la igualdad salarial cuando se ejecuta un trabajo de igual valor, la Organización de las Naciones Unidas implementó el Día Internacional de la Igualdad Salarial, el cual se conmemora el 18 de septiembre.

 

 

De acuerdo con esta organización, en todas las regiones donde se tiene representación a las mujeres se les paga menos que a los hombres por lo que actualmente la brecha salarial de género está basada en un 20 % a nivel mundial.

 

Sin embargo, existe una lucha constante, a nivel de políticas públicas, para lograr la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en contra de las desigualdades históricas y estructurales que se han generado entre hombres y mujeres.

 

La misma Organización de las Naciones Unidas reconoce que el progreso para hacer más corta esta brecha salarial ha sido muy lento por lo que actualmente está dentro de uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, siendo un tema prioritario para muchos gobiernos.

 

 

En el caso de México y de Puebla encontramos que la situación no es muy diferente a la del resto del mundo ya que a nivel nacional el ingreso mensual promedio de un hombre es de 4,533 pesos, mientras que el de las mujeres es de 2,759 pesos.

 

Por lo que hace a Puebla encontramos que la brecha salarial mantiene la misma constante pues un hombre tiene un ingreso mensual promedio de 3,238 pesos, en tanto que para las mujeres dicho ingreso es de 1,801 pesos.

 

Esto quiere decir que la diferencia salarial entre hombres y mujeres persiste aún y cuando las ocupaciones laborales siguen siendo las mismas o incluso con una mayor carga para las mujeres pues además se le suma el trabajo doméstico.

 

Por ejemplo, en Puebla los hombres trabajan en promedio 7.6 horas al día en actividades remuneradas mientras que las mujeres apenas lo hacen 4.6 horas.

 

Pero esto no quiere decir que las mujeres trabajen menos que los hombres, sino que el trabajo no remunerado corresponde a las actividades que llevan a cabo en el hogar.

 

De hecho, al momento de medir el trabajo no remunerado que se va a principalmente a las actividades domésticas, encontramos que las mujeres trabajan en promedio 6.8 horas diarias mientras que los hombres apenas 2.1 horas.

 

De acuerdo con datos del Informe sobre Desigualdad de Género en México, por la Universidad Iberoamericana, las mujeres también se encuentran estigmatizadas a ciertas actividades laborales.

 

Encontramos que las trabajadoras de la educación siguen siendo principalmente mujeres pues representan un 63.9 % del total de la plantilla laboral, misma situación que se repite con el rubro del comercio donde el 55.5.% son mujeres.

 

En contraste encontramos que los funcionarios y directivos de sectores públicos, privados y sociales, el 60.8 % son hombres mientras que sólo un 39.2 % son mujeres.

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