Una vez más, las conferencias mañaneras del presidente Andrés Manuel López Obrador se volvieron tema de noticias debido a las advertencias que le hizo el Instituto Nacional Electoral (INE) para que coloque un mensaje previo a las transmisiones, sumado a las reiteradas llamadas de atención para que se abstenga de abordar temas electorales.
Estas observaciones se suman al historial de sanciones y advertencias que el INE ha interpuesto contra AMLO, quien además de ser blanco constante, también se caracteriza por ser omiso al órgano electoral. Si bien en administraciones anteriores el INE, había sancionado a partidos y sus aliados, nunca se registró un escenario donde el jefe del Ejecutivo haya sido antagonista de esta manera.
Durante el sexenio anterior con Enrique Peña Nieto el INE aplicó medidas contra el PRI, el partido del presidente, en numerosas ocasiones. Antes de que concluyera la administración, el INE sancionó por 98 millones de pesos al tricolor y al Verde Ecologista por hechos de las elecciones del 2012, aunque en ese momento también se aplicó multa de 93 millones de pesos al PRD, PT y Movimiento Ciudadano.
Luego de que se diera a conocer uno de los casos de corrupción más grandes de los últimos años, el de Odebrecht que sucedió entre el 2010 y el 2014, el Tribunal Electoral del Poder del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), consideró que no era necesario multar a Peña Nieto ni al entonces gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo.
Más allá de esto, nunca se le aplicó una medida cautelar, sanción, multa o se le apercibió por violencia de género directamente al entonces presidente Enrique Peña Nieto. Esto es algo que tampoco se vio en años anteriores cuando se llamaba Instituto Federal Electoral (IFE).
Lo mismo sucedió con Felipe Calderón Hinojosa quien, a pesar de que recibió denuncia en su contra en la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales (FEPADE), nunca recibió una multa o sanción. Por el contrario, cuando intentó fundar su propio partido en 2020, “México Libre”, el instituto sí le impuso una multa de 2.7 millones de pesos por manejo irregular de recursos.
Por el contrario, con AMLO las multas y llamadas de atención de la Comisión de Quejas y Denuncias han sido múltiples, más en el momento preelectoral tan adelantado que se está viviendo en el país. El requerimiento de no emitir comentarios en el preámbulo de las elecciones del 2024 es lo más reciente, pero hace poco más de un mes el mandatario atravesó un episodio de confrontación contra el INE.
El 3 de agosto el INE determinó que el presidente cometió violencia política de género contra la candidata de oposición Xóchitl Gálvez, pues la atacó reiteradamente en las mañaneras. Naturalmente el mandatario apeló y se le revocó la sanción, pero fue solo uno más de los encuentros.
También se le prohibió hablar nuevamente de Gálvez, pero se las ingenió presentando una nueva sección en la que presentaba comentarios de la gente para que no se tomará como si él los hubiera dicho.
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Anteriormente, el 28 de julio se le ordenó a AMLO eliminar una conferencia de los medios oficiales del gobierno, pues en ella presentó una encuesta donde se mostraba la ventaja de Morena rumbo al 2024. Fiel a su estilo, el presidente alegó que el INE era usado por élites y grupos opositores para golpearlo, a pesar de que claramente rompió principios de imparcialidad.
Quizá la advertencia más notoria se dio en 2021, cuando el INE acusó que el presidente violó los artículos 41 y 134 de la Constitución, luego de que el presidente hablara de temas electorales durante la veda de los comicios. Al entrar en desacato, el INE advirtió que podría imponer una multa de 615,000 pesos o, en caso de mostrarse omiso, sería acreedor a un arresto de 36 horas.
Hoy en día, a pesar de que los consejeros Ciro Murayama y Lorenzo Córdova ya no están en el máximo órgano electoral del país, con Guadalupe Taddei al mando, el presidente sigue desafiante a las autoridades electorales, algo que no se había visto en otros momentos.
