Nueva York intenta contener la incontrolable plaga de ratas con medidas drásticas

La ciudad de Nueva York implementó una serie de iniciativas para abordar el creciente problema de la población de ratas. Según una empresa de control de plagas, en la ciudad ahora habitan alrededor de tres millones de roedores, un aumento del 50 % en la última década en una población de 8.5 millones de personas. 

Las medidas adoptadas en la erradicación incluyen la aplicación de veneno, la utilización de hielo seco para eliminar madrigueras y la introducción de anticonceptivos para ratas. Sin embargo, muchas de estas estrategias han resultado costosas e ineficaces, puesto que las ratas que predominan en la ciudad son de gran tamaño y agresivas en comparación con otras especies, además de que se reproducen rápidamente. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, estas ratas podrían transmitir a los humanos más de 30 enfermedades distintas. 

En algunos barrios, varios negocios se han visto forzados a cerrar de manera temporal debido a las constantes quejas por las bolsas de productos dañadas y la presencia de heces en su interior. Los residentes de las áreas más afectadas están preocupados por las posibles consecuencias para la salud pública y temen que se desencadene una crisis sanitaria. 

La gestión adecuada de los desechos cobra un papel relevante en estas medidas contra la plaga de ratas. La ciudad está instalando contenedores de basura con tapa y emitió una orden municipal que exige a las empresas y establecimientos de comida que los utilicen para reducir la cantidad de bolsas de basura que llenan las banquetas de Nueva York, las cuales suelen servir como buffet para las ratas. 

Aquellos que no cumplan con las regulaciones, serán acreedores a una multa que va de entre 50 y 200 dólares.