En Corea del Sur, el movimiento 4B, también conocido como el movimiento de las “4 No”: “No matrimonio, no hijos, no citas y no sexo”, continúa ganando fuerza como parte de la protesta feminista que desafía las normas de género y las estructuras familiares tradicionales.
Este movimiento surgió en 2015 en las comunidades digitales feministas a raíz de la frustración de muchas mujeres ante la expectativa que se tiene de ellas en cuestión de matrimonio y maternidad, características que se consideran esenciales para alcanzar la realización personal.
Sin embargo, el 4B propone adoptar un estilo de vida independiente que rechaza por completo los roles de esposa y madre, y se dispone a cuestionar al patriarcado renunciando a estos roles. Este posicionamiento se convierte en una declaración política, especialmente en Corea del Sur, donde se vive una de las tasas de natalidad más bajas del mundo al mismo tiempo que el gobierno incentiva y otorga beneficios para los matrimonios y padres de familia.
???????? | Luego de la victoria de Donald Trump crece el interes de las mujeres estadounidenses en el movimiento feminista coreano 4B
— BlackMaps ????️ (@maps_black) November 9, 2024
Este movimiento se basa en
-No casarse con hombres
-No tener hijos
-No tener citas con hombres
-No tener sexo con hombres
Esto principalmente ligado a…
En 2016, la polémica se intensificó luego de que el gobierno publicara el “mapa rosa” oficial de Corea del Sur, donde se indiciaba la cantidad de mujeres en edad reproductiva de cada distrito, lo que provocó rechazo y fue calificado como una cosificación de las mujeres. Desde entonces, el movimiento no ha hecho más que reforzar su mensaje “mi útero no es propiedad del Estado”, defendiendo la autonomía de la mujer sobre su propio cuerpo y decisiones de vida.
El movimiento 4B también ganó fuerza fuera de Corea del Sur, especialmente en Estados Unidos, donde las mujeres jóvenes lo convirtieron también en su forma de resistencia a lo que la sociedad establece. Con el aumento de los discursos conservadores en el país y el resto del mundo, algunas mujeres se replantearon su visión del matrimonio, la maternidad y los hombres en general, centrando sus esfuerzos en tener una vida con bienestar y autonomía.
Con ayuda de redes sociales como TikTok o Instagram, esta tendencia continúa expandiéndose y promoviendo un estilo de vida alejado de las relaciones heteronormativas. Y aunque este movimiento es menos estructurado en Estados Unidos, también hace un llamado a las mujeres para adoptar la autosuficiencia y empoderamiento económico para no depender de alguien.
En el país norteamericano, el movimiento 4B se convirtió en un símbolo de solidaridad internacional, ofreciendo a las mujeres un espacio seguro para compartir sus experiencias y hacer frente a las políticas que quieren vulnerar sus derechos básicos.