El Gobierno Metropolitano de Tokio permitirá a su personal trabajar cuatro días a la semana como un experimento, cuyo fin es revertir la baja tasa de natalidad de Japón, una de las peores del mundo, según se publica en el diario 'Financial Times'.
El proyecto, que beneficiará a miles de empleados de la administración municipal y comenzará en abril de 2025, permite a los empleados ajustar sus horarios de trabajo para liberar completamente un día de su elección a la semana.
Se espera que, con este cambio en la jornada, el mayor bloque de tiempo no laboral y la mayor flexibilidad deberían, en teoría, hacer que la crianza de los hijos sea menos desalentadora y así más habitantes de esa ciudad se animen a tener hijos.
"Seguiremos revisando nuestro estilo de trabajo de forma flexible para que nadie tenga que sacrificar su carrera debido a acontecimientos de la vida como dar a luz y cuidar de los hijos", declaró la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, en la última reunión de la asamblea de la ciudad celebrada a principios de diciembre, en la que se expusieron los planes de la semana de cuatro días.
El diario británico destaca que la apuesta de Tokio por la semana de cuatro días para aumentar los niveles de nacimientos se produce cuando el número de bebés nacidos en Japón en 2024 va camino de caer por debajo de los 700.000 por primera vez desde que comenzaron los registros en 1899. El número de bebés nacidos en Tokio descendió más de un 15% entre 2012 y 2022.