Mamografía, ¿cada cuánto debes hacerla y por qué no la debes olvidar?

Mamografía, ¿cada cuánto debes hacerla y por qué no la debes olvidar?

Foto: Freepik

En el Día Mundial del Cáncer, que se conmemora el 4 de febrero, muchas mujeres en todo el mundo toman conciencia sobre la importancia de la prevención y el diagnóstico temprano del cáncer de mama. Sin embargo, aunque la mamografía sigue siendo la herramienta más efectiva para detectar la enfermedad a tiempo, es común que después de su primera práctica, muchas mujeres olviden la importancia de hacerse el examen de forma periódica, por lo que este olvido puede tener graves consecuencias.

 

¿Cuándo y con qué frecuencia se debe practicar una mamografía?

 

Las recomendaciones sobre la edad de inicio y la frecuencia de las mamografías varían según las organizaciones y los países. Pero en el caso de México, la lucha contra el cáncer de mama se rige por la Norma Oficial Mexicana, que establece los criterios para la prevencióndiagnóstico, tratamiento y control de esta enfermedad.

 

En ese sentido, la Secretaría de Salud recomienda que las mujeres a partir de los 40 años se hagan una mamografía cada dos años. Esta recomendación está en concordancia con la American Cancer Society (ACS), que establece que las mujeres de entre 40 y 44 años deben tener la opción de comenzar a hacerse mamografías anuales. A partir de los 45, es obligatorio que sean cada año.

 

Y es que el riesgo de cáncer de mama aumenta con la edad. Las mujeres mayores de 50 años tienen mayor probabilidad de desarrollar la enfermedad, lo que hace que las mamografías sean aún más importantes a partir de esa etapa de la vida.

 

Criterios para estudios de mastografía en México

 

En este sentido, el Instituto Mexicano del Seguro Social, (IMSS) recomienda mastografías de tamizaje cada dos años para mujeres de 40 a 69 años que no presenten signos ni síntomas de cáncer, aunque esta edad debe ser evaluada por un médico:

 

Mujeres mayores de 35 años con antecedentes de familiares de cáncer de mama (madre, hermanas, tías).

 

Si una paciente se palpa un nódulo en la axila o mama, o si observa cambios en el seno (color, tamaño, entre otros), se debe hacer la mastografía y ultrasonido, incluso si es menor de 40 años, siempre y cuando su médico lo considere sospechoso.

 

Pacientes que hayan estado expuestas a radiación por un tratamiento.

 

Además de la mastografía, se recomienda la autoexploración mensual a partir de los 20 años y el examen clínico anual a partir de los 25 años. De acuerdo con el Instituto Nacional de Cancerología (INCan), el 90% de las mujeres que recibe un diagnóstico temprano y comienza su tratamiento de manera inmediata tienen mayores probabilidades de sobrevivir al cáncer de mama.

 

¿Por qué muchas mujeres dejan de hacerse mamografías después de la primera vez?

 

A pesar de la recomendación médica y las campañas de concientización, muchas mujeres abandonan el hábito de hacerse mamografías de manera regular. Uno de los factores es el miedo ante la posibilidad de recibir un diagnóstico positivo de cáncer.

 

Otro factor es la falta de educación sobre la importancia del seguimiento. Muchas mujeres creen que, tras una mamografía negativa, no es necesario un examen de nuevo en años posteriores, lo que es un grave error. La mamografía debe repetirse periódicamente, independientemente de si el resultado fue negativo en el pasado.

 

Además, la falta de acceso a servicios de salud adecuados, el costo de los exámenes y las largas esperas pueden contribuir a la falta de seguimiento. Algunas mujeres simplemente no se sienten motivadas a programar sus mamografías anuales o bianuales.

Notas Relacionadas