
Un acuerdo fue concretado con Google Cloud para utilizar su infraestructura de computación por parte de OpenAI, pese a que ambas compañías compiten directamente en inteligencia artificial. Este acuerdo fue firmado en mayo de 2025, luego de meses de negociaciones, y representa un cambio en la estrategia de OpenAI, que había operado exclusivamente con Microsoft Azure hasta enero del mismo año.
La relación entre Microsoft y OpenAI comenzó en 2019, y se fortaleció mediante inversiones significativas en 2021 y 2023. No obstante, en octubre de 2024, OpenAI inició la búsqueda de nuevas alianzas con centros de datos ante la necesidad de servidores más rápidos y mayor capacidad de cómputo.
En el nuevo acuerdo, Google Cloud se compromete a proporcionar capacidad computacional adicional para el entrenamiento y ejecución de modelos de inteligencia artificial desarrollados por OpenAI. Esta expansión responde al crecimiento en la demanda de potencia informática, impulsada por ingresos anuales que alcanzaron los 10 mil millones de dólares en junio de 2025.
La alianza se produce en un contexto de intensa competencia, donde Google desarrolla su propio portafolio de inteligencia artificial mediante DeepMind. Además, OpenAI logró notoriedad con ChatGPT, considerado uno de los principales desafíos para el negocio de búsqueda en línea.
Más allá de esta colaboración, OpenAI continúa expandiendo su infraestructura con proyectos como Stargate, una iniciativa con SoftBank y Oracle valorada en 500 mil millones de dólares, y acuerdos con la firma CoreWeave. En paralelo, también se encuentra en desarrollo su primer chip personalizado, con el objetivo de reducir la dependencia de proveedores externos como Nvidia.
El proceso de negociación con Google se habría visto retrasado por cláusulas de exclusividad existentes con Microsoft, las cuales habrían impedido la firma anticipada del acuerdo. Actualmente, ambas empresas negocian nuevas condiciones en sus inversiones, incluyendo la futura participación accionaria de Microsoft.
Desde la perspectiva de Google, la llegada de OpenAI como cliente fortalece su estrategia de negocio en la nube, basada en el uso de sus unidades de procesamiento tensorial. Estas unidades especializadas fueron claves para atraer a otros actores tecnológicos como Apple y Anthropic.
En 2024, Google Cloud generó 43 mil millones de dólares, representando el 12% de los ingresos de su empresa matriz. Su modelo como proveedor neutral de servicios de cómputo busca posicionarse ante otras grandes tecnológicas, incluidas Amazon y Microsoft.
Al mismo tiempo que provee servicios a OpenAI, Google podría enfrentar una reducción en su inventario de chips TPU, a la vez que contribuye al crecimiento de un competidor directo en el sector de inteligencia artificial. (NotiPress)