Muere Clark Olofsson, el criminal que inspiró el “síndrome de Estocolmo”

Clark Olofsson, uno de los delincuentes más conocidos de Suecia, falleció a los 78 años en un hospital del país escandinavo. Su figura cobró fama internacional tras el robo al banco Kreditbanken en 1973, suceso que dio origen al término “síndrome de Estocolmo”, utilizado para describir la relación de complicidad emocional que pueden desarrollar víctimas de secuestro hacia sus captores.

Olofsson pasó gran parte de su vida en prisión por delitos que incluyen intento de asesinato, robo, violencia doméstica y tráfico de estupefacientes. Sin embargo, su nombre quedó ligado para siempre al “drama de Norrmalmstorg”, cuando fue llevado por la policía al banco durante el secuestro liderado por Jan Erik Olsson, un viejo conocido suyo de la cárcel, esto como parte de las condiciones exigidas por Olsson para liberar a los rehenes.

Durante el secuestro de seis días, los rehenes desarrollaron una relación sorprendentemente cercana con sus secuestradores, y al ser liberados, se negaron a salir antes que ellos, ya que tenían miedo de que la policía los asesinaran, e incluso los despidieron con abrazos. Este comportamiento desconcertó a la opinión pública y dio pie al estudio de una nueva categoría sicológica, más tarde bautizada como síndrome de Estocolmo.

El suceso captó la atención de medios internacionales e inspiró libros, películas y una serie de Netflix basada en la vida de Olofsson. A pesar de su historial delictivo, su figura es retratada con distintos matices que muestran su carisma y la complejidad emocional que rodearon los hechos de 1973.

Tras cumplir condenas en varios países y renunciar en un momento a su nacionalidad sueca, Olofsson estuvo fuera de prisión durante los últimos siete años de su vida, y su muerte pone fin a una de las historias criminales más estudiadas de Europa, cuya repercusión trascendieron el ámbito judicial, llegando al sicológico y mediático.