Andrés Manuel López Obrador lo platicó varias ocasiones desde la mañanera presidencial y lo hacía en voz relativamente baja, como para que el señor que todavía se cree el amo y señor del mundo aunque la terca realidad lo desmienta, no se molestara: “Yo no puedo con usted”, cuando vía telefónica o presencial negociaban una u otra decisión imperial tomada por Donald John Trump y que afectaba a México y su pueblo.
Por las decisiones tomadas por el magnate inmobiliario sumamente enriquecido en forma ilegal, pareciera que con Claudia Sheinbaum Pardo “sí puede”, pero la realidad al sur del río Bravo lo desmiente en forma nítida porque los niveles de aprobación ciudadana con los que cuenta la doctora hasta el día de hoy son superiores a los de AMLO; ya los quisiera Donald John para un día de fiesta porque dispone del respaldo más bajo de un presidente de Estados Unidos en los últimos 80 años. Y no hablemos de los votos ciudadanos porque Trump (o Drumpf) ganó de panzazo y Claudia arrasó con 35.5 millones de votos, 5 millones más que los obtenidos por Obrador seis años antes, con lo que se convirtió en la presidente más votado en la historia de México.
Aparentemente al convicto golpista –como su camarada Jair Bolsonaro– y presunto pederasta Donaldo Juan le vale madre, si nos guiamos por la más reciente retahíla de acciones antimexicanas: aranceles del 30% a las importaciones procedentes de México que pretende imponer a partir del primero de agosto, impuestos al acero, aluminio y cobre, y a los vehículos; una cuota compensatoria de 17.9% al jitomate mexicano y el pretexto de que localizaron ¡un gusano! barrenador en un bovino para suspender la entrada de más piezas a Gringolandia.
Con todo respeto, son ganas de joder, en su acepción mexicana, sólo porque no son sus “compañeros de cama ideológica” (Kurt Hackbarth dixit), como el inútil beato y “hermano” Eduardo Verástegui, los que gobiernan a México; como sí lo hace Nayib Bukele en El Salvador, Javier Milei en Argentina y Benjamín Netanyahu en Israel, el intocado criminal de guerra (CPJ) o carnicero de Tel Aviv, gracias al decidido apoyo de DJT que sueña con ser Premio Nobel de la Paz, presea que hace décadas tiene alto precio en los mercados de la simulación imperial.
Y la más reciente decisión trumpista contra el Estado mexicano (gobierno, población y territorio, dicen), consiste en medidas para restringir el ingreso de vuelos procedentes del país y quitar el estatus antimonopolio a la sociedad de Delta con Aeroméxico, por la decisión del gobierno de AMLO de rescindir algunas franjas horarias de vuelo para las aerolíneas de EUA y “obligar”, en 2023, a las de carga a reubicar sus operaciones de la Ciudad de México al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles. “Chaifa” le llama el enciclopedista Humberto Musacchio.
Como bien apunta la jornalera Rayuela: “Ahora sí se la voló: ¿por qué un país soberano no puede decidir sobre la organización de su espacio aéreo?”. Debido a que el imperio de las barras y las estrellas, en evidente retroceso global que se resiste a asumir y proceder en consecuencia, y su actual administrador DJT, suponen que la realidad es la que dictan en los cinco continentes por medio de la red Truth Social, las órdenes (dictatoriales) ejecutivas y los discursos grandilocuentes, con paupérrimo lenguaje y divorciados de la realidad como el día respecto de la noche. Y su mundo es de consignas, como las que dictaba el propagandista número uno del fracasado pintor austriaco que gobernó Alemania y la condujo al desastre, llevándose a Europa entre las patas.
Acuse de recibo
Por segunda ocasión escuché la tesis de Pedro Miguel en Masiosare (canales 11.1 y 22.1 en repetición no asumida), que “México se encuentra “solo en América Latina”, en base a un recuento de cada uno de los países en proceso de cambio sociopolítico progresista, pero disminuyendo su alcance y situación al máximo. Extraña soberbia en un periodista tan reflexivo... Unicef reporta: “Un promedio de 28 niños y niñas han sido asesinados cada día desde el inicio de la guerra en Gaza, el equivalente a un aula entera, cada día durante 21 meses. “Estos niños y niñas no son combatientes”, dice @unicefchief. “Sufren enormemente y se preguntan por qué el mundo les ha fallado”… De la internacionalista Marcela Roel Pollac: “¡Muchas felicidades por tus 3 000 textos!”… También Arturo Martínez Nateras consignó: “¡Saludos y felicidades! ¡Muchas felicidades!”. Justamente por eso refiero “los dos lectores de Utopía”… AMN presentará el sábado 26 a las 10 horas en Los Pinos, salón Adolfo López Mateos, su más reciente libro: ¡Camarada! Arturo Martínez Nateras. Memorias de un agitador y organizador comunista... Conversación sobre las mañaneras de Andrés Manuel López Obrador y de Claudia Sheinbaum Pardo entre el redactor de Utopía y el periodista casi tamaulipeco José Sobrevilla: https://pepesobrevilla.com/2025/06/28/las-conferencias-que-no-son-conferencias-entrevista-con-eduardo-ibarra/
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