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Rumores señalan que Apple desarrolla una nueva tecnología para la próxima generación de su Apple Watch que sería capaz de controlar los niveles de glucosa de sus usuarios sin obtener muestras de sangre.
Diversos medios de comunicación han filtrado la noticia con base en que Apple ha obtenido varias patentes relacionadas con el control de glucosa sin extraer sangre, incluida una de 2019 que analiza el olor corporal en busca de cambios; y otra que tiene que ver con un sistema óptico para espectroscopía de absorción para analizar materiales en la sangre.
De ser cierto, el próximo Apple Watch tendría integrado un sistema que utiliza espectroscopia de absorción, que es lo que emplean casi todas las propuestas de sistemas no invasivos para monitorizar la glucosa.
De acuerdo con la solicitud de la patente, se trataría de “un transmisor del dispositivo electrónico emite una onda electromagnética (EM) en una banda de frecuencia de terahercios (THz) en un entorno dinámico y un receptor del dispositivo electrónico recibe una onda EM reflejada del medio ambiente”. En esencia, sería un dispositivo de espectroscopia de radio que funciona a muy corto alcance.
El rumor gana fuerza ya que algunas fuentes anónimas afirman que el exgerente general de Apple, Tim Cook, habría participado en pruebas de monitoreo de glucosa no intrusivas, incluso el CEO de la empresa reveló que usó un monitor de glucosa continuo durante varias semanas.
Este dispositivo cambiaría la vida de millones de personas, ya que los diabéticos de tipo 1 deben controlar sus niveles de azúcar en sangre a través de un monitor de glucosa constante (MCG) o pinchazos en el dedo durante todo el día.
El Apple Watch podría monitorizar el nivel de glucosa en sangre de un usuario y alertar si es el caso, lo que podría indicar que puede ser prediabético. El objetivo es que los usuarios que pueden volverse diabéticos tomen medidas al respecto para prevenirlo.
